Antes de comentar el partido, quisiera aclarar que para la Argentina fue un honor disputar el último match de la serie clasificatoria con un país como Grecia, que posee una cultura milenaria. De esto me enteré porque, para que no piensen que los futboleros somos unos cabezas huecas, me metí en Internet para ilustarme con el fin de escribir esta nota. Y lo primero que habría que hacer es comparar las grandes personalidades que surgieron en el mundo helénico con los miserables hombres públicos que supimos dar a luz por estos pagos.
- Los griegos tuvieron su Olimpo (templo donde habitaban los dioses) y los argentinos también tuvimos el nuestro (guarida repleta de demonios asesinos).
- Los grigos tuvieron hombres como Descartes y nosotros tenemos muchos hombres de descarte.
Descartes fue el que basó su teoría en la frase: "Pienso, luego existo". Conclusión a la que también arribó mi hermanita tras el siguiente diálogo con mamá mientras veía el video del casamiento. "¿Y yo adonde estaba?" -le preguntó Lucila al verse ausente. "Estabas en mi pensamiento, hija". "Ah! ¿Y cómo hice para pasar desde allí a tu panza?".
- Los griegos tuvieron a un filósofo como Heráclito que dijo que todo era movimiento y que dio el famoso ejemplo que "nadie se puede bañar dos veces en el mismo río". Nosotros tenemos el Riachuelo en donde ni una sola vez te podés bañar...
- Ellos tuvieron a Platón que hablaba del mundo de las ideas y los argentinos tenemos a cada político que son un plato pues no tienen ni la mínima idea de lo que es el mundo. Y, lo que es peor, simpatizan con Prometeo.
- Los griegos tuvieron a Sócrates quien sostuvo que "sólo sé que no sé nada" y se convirtió en un clásico de todos los tiempos. Yo el año pasado le dije lo mismo a la maestra y casi me hace repetir de grado. Y entre nuestros pensadores nacionales, hay un montón que adhieren a ese precepto sin hacer tanta alharaca. Por ejemplo: Beatriz Sarlo. Cuando en TN le preguntaron si podía responder en tres palabras cual es el sentido de la vida, ella respondió: "Yo que se ".
También Sócrates escribió la máxima: "Conócete a ti mismo". Algunos compatriotas del multimedio le andan esquivando a ese slogan pues temen que si lo hacen, terminen quitándose el saludo ellos mismos.
Si nos fijamos en la actualidad, lo que me da lástima es que Grecia, por seguir las políticas del FMI, haya despilfarrado y tirado por la borda toda su cultura y termine como la Argentina de De la Rúa. Les doy uno ejemplo que recogí de Sudáfrica:
- Le preguntaron a un jugador griego si en verdad eran los culpables de la crisis financiera de Europa. El tipo contestó: "En Parte sí, en Parte non".
Mi papá dice que por culpa de la política neoliberal, el pueblo griego va a declinar en su nivel cultural. Y que algo así también sucedió en los años de Menem y de la Rua. Me explicó que en los 70', los argentinos nos preocupábamos si no entendíamos las películas de Bergman, en los 80', si no comprendíamos la estética de Andy Wharhol, y ahora, tras las crisis y el default, la preocupación de los argentinos es saber que le pasa a Ricardo Fort o como hace los goles Palermo.
En cuanto al cotejo en sí, podría decir que en la defensa de Grecia jugaban: Anastropulos, Papastatophoulos y Spyropoulos. Pero a Messi le pegaban todos Sinescrúpulos. Pero a las patadas sólo nos pudieron contener durante el primer tiempo. Cuando faltaba poco para terminar, el guardavallas, que parecía invencible, no pudo retener dos disparos y así conseguimos el triunfo. Al final poco le sirvió al guardameta sus estudios universitarios (en Grecia son tan cultos que el arquero no es el más troco, como se estila en el río de la Plata, al contrario, para ser el N° 1 tenés que estudiar Arqueología).
Una vez finalizado el encuentro, el flaco Enero (lo apodamos así porque no tiene ni un día fresco) para festejar se pasó con la cerveza. A tal punto que la policía lo detuvo después de un control de alcoholemia. El se excusó afirmando que le estaba haciendo una ofrenda al dios Baco. Parece que las autoridades de Sudáfrica no creen en la mitología griega y menos que menos en las enseñanzas de Empédocles.
PD: Si bien ha quedado demostrado que lo mejor que hacen los griegos es filosofar y los argentinos jugar a la pelota, Palermo demostró que nosotros también podemos crear nuestros propios mitos. Después de haberse fracturado dos veces y tras el fracaso en una Copa América donde malogró tres penales en el mismo día, "el loco" llegando a los 40' se tomó revancha: les hizo el gol sobre la hora a los peruanos, que permitió la clasificación Argentina al mundial, y jugando sólo 10' les convirtió un gol a los griegos.
En síntesis, Palermo es como una margarita: siempre tiene un pétalo de reserva para los casos desesperados .... y la leyenda continúa.
bien bien, no conocía tu blog. pero Descartes no era un griego. Saludos.
ResponderEliminarSeñor, lo vengo siguiendo ya hace unos días..y ya le dije lo que pienso..excelente blog
ResponderEliminarExcelente imperdible. Mucha creatividad.
ResponderEliminarKikito: muy bueno tu blog.
ResponderEliminarTe dejo mi voto para que llegues a los 400 fans y puedas regresar al país. Eso sí, con la Copa ...