KIKITO AL RESCATE DE LA FRAGATA LIBERTAD

Cuando los capitalistas poseedores de fondos buitres embargaron nuestro buque escuela, el gobierno nacional me convocó de urgencia para una audaz maniobra de contraespionaje. Esta consistía en lograr liberar a la fragata Libertad para traerla de regreso al país ... sin derramamiento de sangre ni de guita. La verdad es que nunca pensé que mis escapatorias y rateadas al colegio me habían hecho tan famoso, al punto de ser considerado por Cristina como "el Houdini infantil, nacional y popular". Lo que más orgullo me dio fue que el mismísimo TimerMAN, el supercanciller, fue el que me encomendó esta patriótica misión. Ojo! No confundirlo con otros superhéroes internacionales (como SuperMAN, el que sobrevuela edificios; o SpiderMAN, el que se trepa por ellos) ni tampoco con los autóctonos (MacriMAN, el que derriba edificios o ReuteMAN, el que siempre sale segundo). Ahora sí, tras esta breve introducción, paso a contarles mi fantástica aventura: En un carro de gendarmería, varios fortachones y con cara de pocos amigos me condujeron hasta la terminal de Ezeiza. En el trayecto, me preguntaron si le tenía miedo a las alturas ya que el avión, como diría Menem, iba casi a atravesar la estratósfera para no ser identificado. Para congraciarme con ellos les respondí en su jerga. "¡Afirmativo!". Entonces me entregaron un paquete con sedantes. Apenas arribamos al aeropuerto y al observar la gran cantidad de peldaños que había que subir para "escalar" al Tango 01, no tuve más "remedio" que devorarme las primeras cinco pastillitas. Al lograr ascender al avión, si bien estaba medio adormecido, alcancé a leer un sospechoso cartelito en la cabina del piloto, que rezaba: # Lo mejor que hizo mi vieja fue este gil que maneja # Y allí empezó mi paranoia: ¿el conductor de la aeronave no sería un infiltrado del gremio de Moyano con la intención de boicotear mi gestión?. Lejos de calmarme, mi desconfianza se acentuó al ubicarme en mi asiento y leer otro cartelito muy extraño: # Sin stéreo # ¿Qué carajo está sucediendo aquí? -me pregunté. ¿No estarán viajando conmigo los ladronzuelos del PRO?. Esta última duda, se transformó en una certeza en el momento en que la azafata comentó, seguramente para que cuidemos nuestras pertenencias y los cacos no nos dejen en bolas, "abróchense los cinturones" Parece que la azafata advirtió mi rostro de preocupación pues gentilmente se acercó hacia mí y sensualmente me pregunto: # "¿Le aza fata algo?" Supongo que habré puesto una cara de libidinoso de la gran puta ya que inmediatamente agregó: # " ...le puedo ofrecer lo que quiera ....siempre que entre en un vasito ,,,". Como lo que a mí se me había ocurrido era incómodo con un vasito, me decidí por un whisky que, mezclado con los calmantes, me hizo dormir un buen rato. Sin embargo, me despierto sobresaltado. Ocurrió que el descenso fue tan turbulento que, en un momento, no sabía si habíamos aterrizado o ya estábamos en pleno combate por la recuperación de la fragata... y nos había derribado el enemigo. Antes de descender del avión y dirigirme al puerto de Tema, donde se hallaba anclada la fragata, tuve que ir al baño a ponerme el trajecito con el que tomé la primera comunión, para camuflarme como un guardamarina más. (Cristina no quería ponerse en gastos por las dudas que la misión se abortara y hubiera que pagarle a estos hijos de puta). Así empilchado, con la ropa almidonada que me preparó la abu, recorrí en taxi toda la ciudad de Accra, la capital del país. Y como veía que la gente, al observarme, "se le hacía agua la boca" (más o menos como a mí cuando se me arrimaba la azafata), le pregunté al chofer que era un gallego exilado: - "Oiga, ¿estos tipos siempre son tan cariñosos con los extranjeros?". - "¡Qué va! Son unos degenerados viciosos ...les encanta la antropofagia y la pedofilia ...¡Y cuanto más tiernita es la carne, como la tuya, más locos se vuelven!". A partir de esa revelación, por precaución, le puse la traba a la cerradura del auto y me tapé la cara con el pulover como hacen con los sospechosos que traslandan en los patrulleros ... y continuamos viaje. Una vez arribado a destino, me puse a las órdenes del capitán Johny Laburo que, como si no bastase con ese nombre, sus subalternos lo apodaban "cuchillo sin filo" porque va y viene y no hace nada. Este oficial, ante mi sorpresa, me explicó los pormenores de mi futuro accionar que, "palabras más, palabras menos" (aprovecho este título para saludar a los conductores de ese programa, Zsoto y Tenembaun, con un cariñoso "vayanse a la reputamadre que los remil parió, gorilas de mierda"), consistía en ser el señuelo para que los militares africanos se distraigan, mientras la fragata Libertad , con la tripulación completa, se "tomaba el buque" rumbo a la Argentina. Con el cargo de "Tarzán de maceta", aprovechando que estamos en Africa y que yo soy petiso, mis compañeros me dejaron en la puerta de la embajada Argentina en Ghana ...y se fueron todos a la mierda. Apenas ingreso al lugar, varios forzudos me desnudan y me introducen en una gran olla humeante, llena de papas y zanahorias. Advertido de antemano de que se trataba el asunto, después de probar las verduras, me puse de pie, me bajé los lienzos ...y empecé a orinarles el caldito. Enloquecidos de rabia, los morochos intentaron detenerme al grito: # No importa ...¡En vez de comerlo ...lo usamos para cría!. Y otro, le aclaró; # Pero no, boludo, tendrá "un chizito" pero es macho.... Algunos me seguían con un cuchillo y tenedor en la mano. Otros con un profiláctico a medio poner en el pito. Mientras tanto yo corría buscando una salida de emergencia y, a la vez, ... una espesa colitis les iba arruinando la alfombra persa. Se ve que me cayó mal la mezcla de calmantes, whisky y verduras ...sumado al susto que tenía en esos momentos. Por suerte, los muchachos se asquearon y dejaron de perseguirme. ¡Otra que rateada a la escuela! ¡Esta sí que fue una verdadera escapada a los pedos! PD: En estos momentos la fragata Libertad debe estar por arribar al puerto de Buenos Aires ...y su tripulación recibida con todos los honores. Yo, mientras tanto, escondido en una tapera, les cuento que aun "estoy vivito y coleando", perdón por la frase pero tengo la idea fija porque no se me corta la diarrea, esperando que venga alguien a buscarme. Seguramente mis compañeros habrán pensado que fui víctima de abuso y antropofagia. Pero no contaban ni con mi astucia ni con que a mí me apodan "puerta Pentágono" ...porque soy violable. Solo me resta decir: MISION CUMPLIDA ¡VIVA CRISTINA! --------------------------------------------------------------------------- Si te agrada el humor K de Kikito, hacete miembro del blog, enviame una solicitud de amistad o agregate al grupo KIKITO EN LA RADIO CON SU HUMOR K Gracias ... ------------------------------------------------------------------