lunes, 7 de junio de 2010

KIKITO conoce a Tarzán en Sudáfrica

Desde el aeropuerto nos trajeron a todos los barrabravas y a mí directamente al hotel. Así que todavía no he conocido nada de la República Sudafricana. Por lo tanto, lo que les voy a narrar hoy son algunas leyendas de este continente negro.
Después de cenar algo bastante extraño, que parecía haber sido preparado por Marley, el cocinero, al que denominan Tubaranda Metumba, supongo que es por su mal aliento que hace juego con el olor nauseabundo de los alimentos, me contó la historia oficial de uno de los ídolos de los nativos: Tarzán.
Parece ser que este héroe fue abandonado por sus padres y apareció, tras un naufragio, en una isla solitaria del Africa. Gracias a que pudo sobrevivir pues fue criado por una tribu de simios, terminó creyéndose uno de ellos. A esta altura del relato, ya me surge el primer interrogante:
- Si Tarzán pensaba que era un mono más, ¿por qué usaba taparrabos mientras los animales andaban desnudos?
Además, si Tarzán estaba tan mimetizado con los monos, ¿por qué se ofendía si alguien le gritaba: Che, gorila, vení!?
Llegado a este punto, debo hacer una analogía con nuestro país. Si cuando a mí me dicen "pinguino" no me ofendo, ¿por qué a los gorilas les ofende que les digan gorilas?. La respuesta es muy sencilla: yo estoy orgulloso de ser pinguino y a ellos les da verguenza ser gorilas. Entoces, ¿por qué no dejan de pensar y actuar como simios y listo?
Sin dudas, las acciones de estos tipos siempre les salen como la mona. Veamos algunos ejemplos:
- Cobos debe haber heredado de Tarzán su poca expresividad y parquedad. Cuando conoce a alguna chica es probable que le diga: "Tu ... yo ... cena ... coger ...".
- El parecido entre los Macri y Tarzán está a la vista: sus mujeres son todas "rameras".
- Los ya nombrados más Carrió, de Narvaez, Menem, etc, seguramente creen en la teoría evolucionista de Darwin. En ellos se demuestra sin lugar a dudas que el hombre desciende del mono.
- De Narvaez es un gorila más sofisticado. Para disimular se llenó el cuerpo de tatuajes y cambio las lianas por los hilos de telarañas y los árboles por edificios. Pretende ser "el nuevo hombre araña". Pero, como dice el refrán: "aunque la mona se vista de seda, mona queda".
...
Una persona oriunda de Kenia me contó otra versión sobre Tarzán.
"Juana se cayó en el Arroyo Salgado y los gorilas se negaron a auxiliarla. El pretexto era de que existía un decreto que prohibía sumergirse en esas aguas pues los tiburones "te requisaban de manera injuriosa". Sin embargo, Tarzán no hizo caso a las reglas impuestas por la bruja Ernestina e ingresó al arroyo para salvar a su amada.
Aquí nació el famoso grito de Tarzán, el "¡Ayyyy....ayyyy..!" Precisamente cuando Juana se agarró de su miembro viril.
Curiosos, los gorilas se arrimaron demasiado para observar el rescate ... y varios de ellos cayeron a las aguas. Desesperados, comenzaron a implorarle a Tarzán: "¡Socorro! ¡Auxilio!"
Y el rey de la selva, mientras en una liana ascendía a las alturas con su querida Juana, les gritó: "¡Lo prohibe el decreto! ¡Lo prohibe el decreto!"
Esta versión K (de Kenia) de Tarzán me gusta más. No sólo demostraría que no es gorila sino que, además, nos deja como moraleja lo siguiente:
Cada vez que se empiezan a ahogar en sus propias aguas sucias, los gorilas piden ayuda al pedo porque la bruja Ernestina y sus secuaces están en vías de extición. Y lo que es peor para ellos, cuanto más sucumben más alto vuela el Tarzán K con su amada.

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